viernes, 17 de diciembre de 2010

Suspendida en el limbo

Días en los que me pregunto a que chingados jugamos… tú con tus miedos yo con los míos ¿a dónde vamos?


En serio qué futuro tendremos… me da miedo preguntarte, me aterra que saques el tema y aun así, aquí estamos… sin planes, suspendidos en el limbo del que pasara… a donde fregados vamos… los chistes, los comentarios y aun así suspendidos…


El aire me viene bien, la nube me encanta, la falta de formalidad la amo, pero para que desgastarnos en arreglar lo incomodo, si esto es un círculo vicioso que me lleva a mi punto actual…


O simplemente pedir de regalo ser mantequilla, y lograr resbalar aquellas acciones que no me molestan pero me lastiman… para que lastimarme con lo que no me importa, o como hacer que lo que me importe no me aterre…


De regalo un chip de cordura para que logre madurar, para que logre conseguir dar ese paso de locura en mi mente insana… donde quedo esa niña que deseaba planear todo, ahora está la adulta que no planea por miedo, miedo a ver derrumbados los sueños… aprende a no desear para no llorar por lo no logrado… y ahora mi lucha interna es por el deseo de desear, lo que no debería desear, porque no se lograra si lo deseo…


Ahhh a donde chingados caminamos… me gusta flotar contigo… me da miedo aterrizar conmigo, quisiera que me aterrizaras con un manual para gente inquieta, indecisa y maltrecha… Tal vez me gustaría saber que tú ya sabes dónde vamos a aterrizar…