Mi adorada compañía, soy egoísta
lo admito, te comprendo hoy,
no porque sea un día especial…
simplemente porque hoy comprendí el desprecio.
El usar a alguien por un momento,
el buscarle sólo para un segundo
y me sé maldita,
egoísta.
Te busco cuando te necesito,
te olvido los demás segundos…
Tú con tu incondicional tranquilidad,
con la calidez de tus trazos,
con el aroma a satisfacción.
Tú que siempre me acompañas
y consuelas, la que me comprende y me lee.
Tú que simplemente estas, siempre estas,
y yo, que hoy te pido disculpas porque te necesito,
y mañana te olvidare porque lograste una vez más
alimentarme con tus delicadas frases,
mi ego maldito
que me permite respirar y necesitarte...
No hay comentarios:
Publicar un comentario